El reto

Debido a las altas temperaturas de la región, ejecutar un piso de alta planicidad y sin juntas de retracción era el desafío principal. Así como controlar la contracción del concreto y asegurar uniformidad de color y textura; por último, poder lograr un acabado espejo en superficie de gran tamaño y expuesto a humedad y contaminantes salinos del entorno.

La solución

Para poder resolver la necesidad del cliente de una losa de 30 cm con un concreto tipo MR45, se utilizó un concreto de baja contracción y alta resistencia con TMA de 32 mm. Colado en franjas controladas con juntas de construcción, aserradas y de aislamiento.

Se utilizaron las fibras metálicas Dramix® 4D 80/60 BGE con una dosificación de 30 kg/m³, y se logró obtener un piso jointless sin fisuraciones visibles ni cortes de retracción, y lo más importante, una losa con alta durabilidad frente a condiciones de uso intensivo y ambiente marino.